RUGE Castilla-La Mancha resalta la dificultad que supone para los jóvenes el acceso a una vivienda

vivienda

Con motivo del Día Internacional de la Juventud, RUGE Castilla-La Mancha (la organización de jóvenes ugetistas en la región) reclama abordar los dos grandes problemas que sufre el colectivo: precariedad y dificultades en el acceso a la vivienda.

Con una tasa de desempleo que duplica a la de la población general y con unos salarios muy inferiores también a los del resto de ocupados, “los jóvenes nos tenemos que enfrentar a unos precios del alquiler que, desde 2015 y hasta 2022, se han incrementado en Castilla-La Mancha en un 25,4%, llegando a representar el 57% de nuestros salarios”.

Adrián Carbajo, portavoz de RUGE CLM, resaltaba que solo el 13% de los jóvenes de la región están emancipados, siendo Castilla-La Mancha la tercera región con mayores dificultades para independizarse.

RUGE pide regular los precios máximos en zonas tensionadas y trazar un ambicioso plan de ampliación del parque público de viviendas, reforzando también la cobertura de ayudas como el bono joven de alquiler. “Un año más, como hacemos cada 12 de agosto, conmemoramos el Día Internacional de la Juventud y lo hacemos -lamentablemente- recordando los mismos problemas a los que nos seguimos enfrentando los jóvenes: precariedad laboral, temporalidad en nuestros contratos, dificultades en el acceso al empleo…”, ponía de manifiesto Adrián Carbajo.

“No queremos que juventud siga siendo sinónimo de precariedad, ni que el pasaporte para encontrar un trabajo con buenas condiciones sean años de aceptar abusos e incumplimientos”. Por eso, desde RUGE CLM piden a empresas, instituciones y organizaciones romper con estigmas y prejuicios “y que nos den la oportunidad de mostrar nuestra capacidad y lo mucho que tenemos que aportar al mercado laboral”.

Señalaba que, según el informe “Personas jóvenes: precariedad y dificultad de acceso a la vivienda”, presentado hoy por RUGE a nivel confederal, las personas jóvenes son las que siguen registrando una mayor precariedad en el empleo, con tasas de paro, temporalidad y parcialidad superiores a la media nacional.

A esta mayor inestabilidad laboral -recoge el informe- hay que sumarle además la precariedad salarial y es que el salario no llega a representar ni tres cuartas partes del salario medio de la población, lo que provoca que el 41,7% de los jóvenes no tengan la capacidad de afrontar gastos imprevistos.

Deja una respuesta