Si bien en el cómputo general los accidentes de trabajo en 2024 han disminuido en Castilla-La Mancha, UGT lamenta y muestra su preocupación por el importante incremento de la cifra de personas que han fallecido en sus puestos de trabajo. El sindicato pide una profunda reflexión y medidas de choque para poner freno a estas “trágicas” estadísticas.
Según los datos hechos públicos hoy por el Ministerio de Trabajo y Economía Social, en Castilla-La Mancha -de enero a diciembre de 2024- se produjeron un total de 27.549 accidentes laborales, de los cuales 27.265 fueron leves, 226 graves y 58 mortales. Son 97 accidentes menos que en 2023 (-0,4%). Han disminuido también los leves, un 0,5% y los graves, un 2,2%, si bien los mortales han pasado de los 33 que hubo en 2023 a 58 en 2024.
Por provincias destaca que 20 de esas muertes se han dado en la provincia de Ciudad Real, seguida de Toledo, con 16; Guadalajara, con 11; Albacete, con 9; y Cuenca, con 2.
En 2024, en Albacete, se registraron 4.646 accidentes, un 3,4 menos que el año anterior. En Ciudad Real 5.306, un 1,2% menos. En Cuenca 3.286, un 0,3% más. En Guadalajara 4.677, un 1,6% menos. Y en Toledo 9.634, un 2% más.
UGT viene constatando a lo largo de 2024 el aumento de los fallecimientos de trabajadores/as cuando están prestando sus servicios fuera de su centro habitual. En este sentido, la coordinadora regional de Prevención de Riesgos Laborales del sindicato en la región, Irene Ortega, demanda que se refuerce la coordinación de las actividades preventivas entre las empresas, también la prevención en cuanto a seguridad vial ya que han crecido los accidentes laborales mortales in itinere.
Aunque el índice de incidencia de siniestralidad en la región ha bajado, resalta que no ha ocurrido así en el caso de los accidentes mortales, ya que aquí ha crecido de manera importante.
UGT Castilla-La Mancha exige a las empresas el cumplimento estricto de la Ley de Prevención de Riesgos Laborales y extremar las medidas de precaución. Recuerda que son ellas las que tiene la obligación de proteger la seguridad de las personas trabajadores y de poner todas las medidas que sean necesarias para garantizar la salud laboral.
“Cualquier muerte en el trabajo resulta intolerable, pero estar hablando de que los fallecimientos han subido un 75% en la región es alarmante y nos debe llevar a plantearnos muchas cosas”, ponía de manifiesto Irene Ortega.
UGT insiste en que es necesario dotar de más recursos humanos y materiales a la Inspección de Trabajo para que controle el cumplimiento de las normas y para que investigue y depure responsabilidades.